Auge y caída de Horywargames II. La historia de un blog: éxito colaborativo y decadencia inesperada (2011-2013).

Como bien saben, en la entrada anterior de esta serie histórica, dedicada al auge de Horywargames, analizamos la etapa comprendida entre 2009 y 2010, un momento de crecimiento general del mundillo de los blogs, y más específicamente, de la blogesfera rolera y de juegos de mesa española. Tras dos años, se trataba de consolidar el blog y mantenerlo en el tiempo. Vamos pues con el análisis de la etapa de éxito del imperio, si entendemos éxito por periodicidad en las entradas, participación de colaboradores y algunos comentarios. Porque, ciertamente, justo en el mejor momento, y sin que apenas supiéramos verlo, nos abocábamos directamente a la antesala de la decadencia. 

 

Siempre es duro reflexionar sobre el pasado y los errores cometidos.
 

  I. 2011, cuando todo parecía posible. 

En el año 2011 el blog tuvo un total de 36 entradas. Si no habían sido tan numerosas como las entradas del año anterior habíamos ganado nuevos colaboradores a cambio y un espectro cada vez más amplio. El giro hacia el rol que anunciábamos el año anterior se vio confirmado con la entrada de nuevos compañeros. El primero fue José María Quinto, un buen amigo y prolífico autor de blogs. Además de rolero de toda la vida y participante en una de las primeras asociaciones de rol de la provincia de Alicante, José María se dedicaba a crear ambientaciones y ayudas para sus juegos preferidos, como tendremos ocasión de ver. Entre sus blogs, destacamos La Llave y la Puerta, un blog literario activo entre 2014 y 2019, y también Necrópolis de la Luna Negra, activo entre 2011 y 2019. Así pues, entraba a formar parte de la familia de Horywargames en un momento de máxima creatividad.

José María se estrenó con su entrada sobre MERP, siendo acompañado ese mismo mes por Makarren, con La Marca del Este. Confirmábamos el giro hacia el rol, y disfrutábamos del que, con el tiempo lo veo claro, fue el fenómeno editorial rolero más especial para el que esto escribe, al menos, desde que descubrí en los 90 Advanced Dungeons & Dragons. José María continuaba destripando MERP y su gestión, Makarren anticipaba lo que venía con la nueva edición de Aquelarre, yo hacía de cronista de la campaña de Mago que estaba jugando con mi poco acostumbrada perspectiva de jugador. Y aún quedaba tiempo para que Makarren siguiera con sus miniaturas en DBA.

José María también se metía con los juegos de pc como Battle for Wesnoth mientras ofrecía consejos para controlar a los jugadores o su trilogía dedicada al espíritu del juego y los directores de juego mercenarios. Además nos ofrecía muestras de su irrefrenable creatividad, con adelantos de las ambientaciones que estaba creando, como era el caso de Darcovia, una parodia de Ravenloft, que podéis descubrir aquí y aquí, donde se presenta al dios Bimboo de la ciudad de Donokrut. Este es otro contenido que me encantaría poder presentar aquí pero me temo que, como muchos de nuestras creaciones de esta época, está actualmente perdido. Aún así, el juego tuvo sus playtesting incluso, como podéis ver aquí y aquí. Aún tenía tiempo de reseñar juegos como Gañanes, que aún tengo ganas de probar.

Por último, capítulo aparte merece tanto su reseña de Donjon como su ayuda de juego para recrear La Torre Oscura de Stephen King sobre el juego, aquí  y aquí. Exhumando estos restos arqueológicos tanto tiempo después me emociona la capacidad creativa que se vertió en el blog y como, al contrario que en las redes sociales, allí sigue esperando a ser descubierta. Ha pasado una década y ahí siguen los archivos, así que si me llegan las fuerzas, intentaré darle la visibilidad que le corresponde.

Con tres en el equipo, las debilidades del grupo pudieron soslayarse más tiempo.

Mientras tanto, Makarren disfrutaba de las mieles del éxito y la gloria miniaturil. A la vez que hacía de corresponsal horywargamero por diversos torneos, paseaba con gran éxito y prestancia su estandarte por las citadas competiciones, como podéis ver aquí. Además, continuaba manteniendo bien surtido el contenido de wargames, con DBA y sus torneos. En ellos seguía haciéndose con victorias y más victorias, consiguiendo fama y honores sin par. Eso sí, todas las riquezas que consiguió, como podéis ver en las entradas, las invirtió en wargames y juegos de rol. 

Su dedicación al competitivo tampoco nos privó de artículos de reflexión más que interesantes. Como muestra, recomiendo este sobre los cuentacartas y los problemas que ofrecen a la hora de jugar. Además, siguió ilustrándonos sobre las bondades del juego por mail, con su partida al Conquest of the Empire a través de ese sistema. Recordemos que Makarren había sido webmaster de Horydiplomacy, la mítica web dedicada a jugar a Diplomacia de Avalon Hill a través de ese sistema. Seguía defendiendo un sistema al cual aún le veo atractivo.

Por mi parte, ya se ve que, al estilo del gran entrenador de fútbol, había reunido las figuras en mi equipo y mi trabajo se limitaba a dejarlas jugar y estorbar poco. No intervenía mucho porque además me estaba preparando para cambiar de país de residencia por motivos laborales una temporada, y no podía atender el blog como quería. Aún así, animado por el renacer rolero, y como prueba la carpeta de mi ordenador titulada "Nueva etapa rolera 2010", estaba volviendo a dirigir cuando el tiempo me lo permitía. Fruto de ello surgió esta entrada, donde comparaba el desempeño de dos grupos distintos (colaboradores del blog vs amigos de la infancia) con la misma partida, la maravillosa Epifanía de Nosolorol. Esta fue una de mis cinco entradas de 2011, estando el resto dedicada a la campaña de Mago que por aquel entonces jugaba.

La estrella invitada en 2011: Maet

En mayo de 2011 llegó Maet, que nos regaló dos entradas reseñando Cthulhutech, aquí y aquí. Maet era y es un buen amigo, que en esta época llevaba varios blogs y estaba atareado en mil proyectos. De hecho, participaba en No soy un master cabrón, son los dados, blog mítico ya por el nombre escogido, y  Silent Maet. Aunque son dos blogs cerrados, creo que son un sincero homenaje a la creatividad e inquietud de Maet, al que solo las circunstancias impidieron participar más en Horywargames. 

Sin embargo, me glorío de haber podido participar en varias partidas de rol con él, y al final, eso es lo fundamental. El caso es que Maet sacó un rato para dirigirnos la partida inicial de La Marca del Este. Por supuesto, mató inmisericorde mente a mi paladín, que tuvo una actuación tan heroica como inútil. Más importante aún, contagiado por el resurgir del OSR en España, nos regaló con una aventura para La Marca del Este espectacular. En su día estaba subida en el Codex de la Marca, pero me temo que en el nuevo Codex no está, así que intentaré por todos los medios buscarla para compartirla con ustedes, pues ya tengo el permiso del autor. Así pues, espero poder recuperar pronto esa partida de creación propia de Maet y compartirla con ustedes. De momento, y para abrir boca, aquí pueden ver la reseña de Villasilencio.

 

 Habíamos desatado el poder de los blogs, ¿recuerdan? Pero ¿seríamos capaces de controlarlo? A la vista está que no.

II. 2012 y los síntomas de agotamiento: la antesala del fin.

Se abría 2012 con grandes expectativas. Makarren nos anunciaba en febrero nuestro blog hermano, Horyminiaturas, donde exponer sus espectaculares trabajos de pintado de miniaturas y asistencia a torneos. Un proyecto que a día de hoy aún pervive, y del que estamos muy orgullosos. También reseñó Dwarf Fortress, el juego de ordenador, mostrando su interés por seguir explorando los mundos frikis a todos los niveles. Por eso se pasó por las Hispacon, evidentemente.

El lógico traslado de las entradas de miniaturas a nuestro blog hermano fue uno de los factores que redujo nuestra producción. Pero no fue el único. En mi caso,únicamente publiqué una entrada en todo el año 2012. Fue la reseña del familiar juego de mesa Pingüinos. Sea como fuere, en 2012 el blog publicó únicamente 22 entradas, haciéndose evidentes ciertos síntomas de agotamiento entre aquellos que habíamos iniciado la andadura, como era lógico. Sin embargo, contábamos con la sangre nueva, José María, que, cual enano defendiendo una tumba de un asalto orco, llevaba con notable desempeño y productividad la sección rolera. 

Nos deleitó con la reseña de Grecia, el juego de rol, a cuyo autor pudimos conocer en unas jornadas. Su labor estaba destinada a perdurar, pues además de la reseña, preparó ayudas de juego para el mismo, con tres gigantes que podéis consultar aquí y también con un suplemento con objetos divinos, accesible aquí. También analizó Dogfight y Cthulhu Oscuro, uno de mis reglamentos minimalistas preferidos y que usé para dirigir varios módulos. 

Además, su análisis del juego de mesa Hive se convirtió en un éxito instantáneo, convirtiéndose en la cuarta entrada más vista en la historia del blog. Por otra parte, también ejerció de cronista, asistiendo junto al que esto escribe a las Jornadas que se celebraban cerca de nuestras localidades, como las JLA de Alicante, aquí y aquí.

La estrella invitada en 2012: José Mariano Sáez.

Uno de los grandes honores de este blog es haber contado con la participación de José Mariano. Un gran aficionado al rol, escribió en Horywargames dos entradas sobre juegos de mesa clásicos, precisamente en el momento de expansión de los nuevos juegos de mesa. Sus análisis de Euro Disneyland y La Ratonera tuvieron un gran éxito. De hecho, este último análisis se convirtió en la tercera entrada más visitada del blog hasta hoy.

José Mariano, que por 2012 se encontraba escribiendo en Artesanía rolera, siguió mostrando su afición por el rol, pero también su indiscutible calidad como escritor y creador de módulos. Y como bien sabéis, a día de hoy  ha publicado su espectacular aventura Los asesinatos del juguetero en la editorial Nosolorol. Todo apunta a que estamos de enhorabuena y esta es solo la primera de toda una serie de aventuras en las que José Mariano hace lo que mejor sabe hacer: conjugar los horrores ocultos de los Mitos con la España de los años 20 y 30. Así pues, sirvan estas líneas como testimonio de admiración por su trabajo bien hecho y reconocido. Hoy día podéis leer a José Mariano en su blog, que acabo de incluir en nuestra lista de blogs.

Poco a poco, inexorablemente, fuimos cayendo.
 

III. Crisis y agotamiento: 2013 o el final de Horywargames como proyecto colaborativo.

La nueva etapa de Horywargames llegó sin que apenas nos diéramos cuenta. En 2013 volvió a crecer el número de entradas, con un total de 38, 18 de ellas escritas hasta mayo. Si en 2009 y 2010 Makarren había liderado la etapa de auge y crecimiento del blog, nos encontramos con que 2011 y 2012 fue la etapa más maravillosa. Sin saberlo, habíamos disfrutado de la etapa de crecimiento, consolidación, entrada de nuevos colaboradores como José María, las entradas ocasionales de las estrellas invitadas... Todo conformaba la época dorada de Horywargames, convertida en un proyecto coral, con participación de personas diversas, con inquietudes distintas. Lamentablemente, no duró mucho porque  2013, sin darnos cuenta, certificaba sin mensajes de despedida el final del blog como proyecto colectivo.

En el año 2013 el blog contaba ya con cuatro años de existencia, dos etapas claramente diferenciadas, y ambas razonablemente exitosas. Precisamente en esta segunda etapa que estamos analizando hoy, el estallido de jornadas, torneos y similares ofrecía constantes oportunidades de conocer más gente con esta afición, entrar en contacto con otros blogs y expandir la afición. Entonces, ¿cómo es posible que en el mejor momento el blog como proyecto común comenzase a languidecer? 

Hoy día, aunque no lo tengo claro del todo, se me ocurren algunas causas. A nivel estructural, en 2013 comenzaban a hacerse evidentes las consecuencias de la crisis económica global de 2008. La misma afectó duramente a algunos de los componentes del blog. De hecho, tuvimos una entrada sobre la promoción para desempleados de Nosolorol, que usamos sin dudar.

Pero además del análisis estructural, era evidente el cansancio y las responsabilidades adultas que iban llegando. En mi caso, el único que conozco bien, era evidente que desde la creación del blog mi participación se iba reduciendo de forma paulatina, aunque de vez en cuando algunos fogonazos en forma de entrada recordaban que parte de mi corazoncito estaba puesto en este proyecto. Sin embargo, en 2012 había pasado a formar parte de la larga lista de parados, y debía terminar de forma urgente algunos proyectos académicos para cerrar etapas. En ese sentido, y por absurdo que parezca, creo que jugué a rol más que nunca a partir de esa fecha, y toda mi energía se dedicó a preparar campañas y dirigirlas. No reservé ni un poco de fuerzas para poder volcar en el blog los resultados, cosa que ahora lamento y espero reparar, parcialmente por los años transcurridos. No estoy orgulloso, pero así fue como sucedió.

Hasta mayo fue José María quién continuó llevando el peso del blog. Desde reseñas de juegos de mesa como Twilight Imperium, La Resistencia, hasta La Sombra de Cthulhu o Carcassone: Cazadores y Recolectores, pasando por Juego de Tronos, World of Warcraft, Descent, La Guerra del Anillo y juegos de rol como Mundodisco, Z-corps y sus suplementos, Apocalypse World, Saqueadores de Tumbas. No me detendré mucho aquí porque esto seguiría siendo así largo tiempo.

Pero hasta mayo de 2013 aún se mantuvo la condición de proyecto colaborativo, pues yo llegué a escribir dos entradas. Hoy día me sorprende la engañosa percepción del momento. Siempre tuve claro que escribía poco en el blog, pero revisando las estadísticas, obtengo cifras llamativas una década después. Sin contar las dos entradas de presentación a finales de 2088, publiqué 15 entradas en 2009, dos tercios de ellas dedicadas a mi partida en solitario al wargame Leningrad. En 2010 mi participación se redujo a 4 entradas. La proporción se mantuvo, y publiqué cinco entradas en 2011, dedicadas fundamentalmente a cuestiones relacionadas con el rol, pero en 2012 escribí una única entrada, coincidiendo con ese momento personal complicado. En 2013 escribí únicamente dos entradas, que creo que reflejan bien lo que me sucedía. Ya no volvía a escribir hasta finales de 2021. Significativo.

En cifras totales, había publicado 27 entradas en los cuatro años y medio que estamos analizando. Aproximadamente, unas cinco o seis entradas al año. Por aquel entonces el blog contaba con unas 160 entradas, así que puedo decir que fui responsable de un exiguo 17% de las mismas. La verdad, es una cifra que no parece muy acorde a mi condición de impulsor y creador del blog. Es evidente que sin Makarren y José María, que acumulaban entre ambos más del 80% de las entradas, esto habría muerto mucho antes, por tanto, sirva esta línea como reconocimiento para ellos. 

Concluía una etapa que, es evidente, hoy veo con nostalgia y en la época, atosigado por los problemas del momento, apenas valoré como debía.

En enero de 2013 ya explicaba mis compras de rol en pdf. Cuanto más complicada era mi situación personal y laboral, más me enfocaba en jugar a rol. Compraba, leía y jugaba. Y pese a ello, por la razón que fuera, y aunque tomé notas, no encontré momento para subirlo al blog. Hoy día le diría a mi yo de 2013 que aquello fue imperdonable, pero tampoco puedo ser muy duro con él porque tampoco fueron buenos tiempos. De hecho, diría que tengo que felicitarle por lo demás, salvo en el blog, que descuidó, consiguió solventar sus proyectos pendientes y su situación laboral, y encima, consiguió jugar a rol, que al final era lo más importante.

Y como vemos, jugaba a rol, pero no escribía en el blog. Y creo que algo de ese fin de ciclo se percibe en mi última entrada hasta que retomé la escritura a finales de 2021. Aquella entrada, titulada "Aquelarre y la memoria: cerrando el círculo" explica muchas cosas, creo. En ella ya tomaba la entrada como pretexto para reflexionar sobre mi pasado como jugador de rol; era un ejercicio de memoria, como decía en el que recordaba mi trayectoria como jugador desde 1997 y los diversos altibajos que había sufrido mi relación con Aquelarre. Sintomáticamente, ya aludía yo a la nueva etapa rolera iniciada en 2010 y creo que el tono de esta reflexión de 2013 es significativamente parecido a la que me impregna en 2022. Sea como fuere, dejé de escribir hasta hace unas semanas y así, sin entradas ni avisos, sin ser consciente de ello, terminaba la etapa en la que Horywargames había sido un proyecto colaborativo. Sirvan estas líneas como homenaje a aquello que, mejor o peor, supimos hacer.

Únicamente nos queda una entrada, más breve, para valorar la etapa final del blog y analizar algunas estadísticas de estos años. Es mi sincero homenaje, como improvisado cronista, a todos aquellos que escribieron en el blog en aquel tiempo y llevaron adelante este proyecto. 

 Por último. Si habéis llegado hasta aquí os tengo que agradecer la atención prestada y a la par, pedir disculpas por mi escasa capacidad de síntesis, bien ejemplificada en este texto. Nos leemos.