De compras por Madrid

Bueno, tras mucho tiempo en el dique seco, voy a contar mis andanzas, aventuras y desventuras por las tiendas frikis de Madrid y las compras consecuentes. Todo comenzó con la llegada a Madrid, donde resido actualmente, de mi buen amigo Javier y su proposición de ir a la zona de Callao, al ladito de la Gran Vía, para explorar las posibilidades fundamentalmente roleras que nos podían ofrecer.

Así pues, a las 4 de la tarde ya estábamos en la plaza de Callao. Nuestra primera parada fue Metrópolis, donde encontramos con gran alegría por nuestra parte una sección de saldos con rol antiguo, que es lo que precisamente íbamos buscando. A nuestra edad, no es sólo que no vayamos a comprar el AD&D 4ª edición; es que tampoco queremos saber nada de la 3ª. Pero para nuestro placer, allí encontramos dos joyas de 2ª edición que rápidamente cayeron en mis manos, además de otro material rolero antiguo digno de mención, aunque no encontráramos nada de nuestro interés.




El entorno de campaña de Reinos Olvidados, una maravilla que ya, a mi edad, no sé si conseguiré jugar, y que sí tendría que haber tenido de joven, pero bueno, nunca es tarde si la dicha es buena. Como coleccionismo es interesante, y el precio de saldo que tenía (una sola cifra) hacía imposible no comprarlo, como sincero homenaje a ese juego que tantas buenas tardes nos ha hecho pasar, y espero que nos siga haciendo pasar.





Más de lo mismo, pero más exagerado aún. Al igual que la caja anterior, corresponde a las ediciones de 1999 que realizó Martínez Roca en el ocaso de la 2ª edición, justo a punto de llegar la tercera, y de ahí que hayan estado criando polvo en un almacén. Poca gente quiso comprar ya este material cuando salía la flamante tercera edición. Además, El Regreso a la Tumba de los Horrores tenía un público muy restringido; aventureros de nivel 12 o más para ingresar en un dungeon terriblemente mortífero del que probablemente muy pocos saldrían con vida. Pasa a formar parte de mi colección de "Míticos dungeons que casi seguro que nunca jugaré", justo al ladito en la estantería de "Las ruinas de Bajomontaña", otro de los míticos de Reinos Olvidados. También compré a precio de regalo "La cripta de Lyzandred el Loco", otro módulo de esta época, en este caso para Greyhawk, un dungeon también demasiado típico, quizás, para lo que yo suelo buscar en AD&D. De todas formas, encontrar este material a día de hoy es sinónimo de comprarlo, por nostalgia, coleccionismo y sus irrisorios precios.

Tras curiosear Metrópolis, donde encontramos la famosa profecía de Rabolú, nos dirigmos a Atlántica. Sorprendido por la cantidad de wargames "serios", miniaturas de gran sabor histórico y toneladas de material Games Workshop, nos dirigimos a la zona del rol, donde obtuve dos módulos para usar en breve.

Junto a AD&D, uno de mis juegos favoritos siempre fue La llamada de Cthulhu, porque yo siempre fui ávido lector impenitente de Poe, Dunsany, Lovecraft, James y toda esta recua de autores poco respetados por la supuesta literatura seria. Bueno, en estos momentos, en los que jugar una gran campaña de AD&D es casi imposible, y sólo considero posible partidas más cortas en la ambientación Ravenloft (que me apasiona), las partidas de La llamada son una opción segura. Segura por facilidad de prepararlas, sencillez del sistema, ideal para iniciar a neófitos, similitudes con nuestro mundo que no requieren de explicaciones de mitologías fantásticas... Así pues, espero usar muy en breve con alguno de mis tres gruposo de Cthulhu estos módulos. Ya veremos si serán utilizadas en el grupo madrileño, en el alicantino o en el de mi localidad, pero serán utilizados, siempre que su calidad supere mis estándares.




Como veis, un módulo y manual de ambientación sobre la Primera Guerra Mundial, acontecimiento maravilloso para fusionar con La Llamada. Desde que dirigí esa campaña fabulosa de Ricard Ibañez, "La Bestia no debe nacer", en la que los personajes jugadores eran antiguos soldados, quedé maravillado por las posibilidades. Y de ahí la compra del módulo, que incluye una partida de torneo. El otro módulo contiene tres historias autoconclusivas, muy diferentes entre sí (la España de la Inquisición, la Inglaterra isabelina, y una base lunar en el siglo XXI) de las que daré buena cuenta, porque además cada una de ellas contiene seis personajes pregenerados listos para jugar. Precisamente, lo que voy buscando en este momento de mi vida, partidas de una sesión que sacrifiquen extensión pero no calidad.

También visité Generación X, pero entre un campeonato de Magic, otro de Blood Bowl, fue bastante complicado ojear la escasa estantería de rol, consumida por material moderno el cual no me genera mucho interés. A excepción del juego de la editorial No Solo Rol denominado Lances, por el cual pregunté en todas las tiendas que pisé pero en ninguna quedaba.




Por último, algo de ćomic que compré en diversas tiendas, tanto de comics como de rol. El Eternauta, una obra mítica del cómic argentino, de la que quedé cautivado al leer un capítulo suelto en la revista 1984, creo recordar. Tenía una deuda hace ya tiempo con esta inquietante y apocalíptica historia, en la que un buen día comienza a nevar en Argentina, y todo aquel que es rozado por uno de esos extraños copos, muere. Espero resolver pronto el misterio.

También Gorazde, Zona protegida, una novela gráfica de Joe Sacco en la que relata con toda crudeza su experiencia como reportero de guerra en la antigua Yugoslavia. Un divertimento y un pequeño libro de crónica periodística en forma de cómic. También cabe destacar del autor otras obras relacionadas con el conflicto palestino, muy recomendables.

Por último, The House of Mistery, una recopilación de historias macabras y misteriosas al más puro estilo de los cuentos del Guardián de la Cripta, que por cierto, se está publicando ahora en los volúmenes "Creepy", con los que pronto me haré. Hasta donde sé, este House of Mistery debe ser la competencia que la editorial DC le hacía a EC (la que recopilan en Creepy), pero no estoy nada seguro. En todo caso, estos comics macabros, herederos del estilo de Poe y sus adláteres, fueron incluso censurados y perseguidos por medio de la Comics Code Authority.

Y hasta aquí las compras del viernes. El sábado, en la Feria de Militaria madrileña me hice con el primer volumen de "Canciones de la Guerra Civil", en CD (ya tenía el segundo volumen en mi casa) y con una medalla soviética, conmemorativa del desfile militar de 1978. Reservo la foto de la medalla para una entrada más wargamera.

Esta tarde tenemos la primera partida multijugador al Condottiere. Completamente improvisada hace una hora, se desarrollará en breve. Espero fotografiarla para poder hacer una buena reseña.

Saludos

Comentarios

  1. Los módulos de AD&D tienen muy buena pinta. Espero que cuando vuelvas por aquí, me dejes leerlos, ya que no creo que viva para jugarlos.

    ResponderEliminar
  2. Mi amigo, no tengo nada claro que pueda dejarte leer estos módulos, porque están precintados y su valor precintados es altísimo. Si necesito efectivo siempre puedo vender estas cajas por unas diez veces lo que me costaron, y si las abrimos, perderán valor. De todas formas, si las vas a utilizar o nos vas a regalar una campaña con ellas, las abro sin dudarlo.

    Un abrazo

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Nos gustaría que nos dejases algún comentario

Nuestras entradas más populares